Macanudo de Liniers

Macanudo de Liniers
"¿Y si no fuésemos otra cosa que los brazos de una voz?" Decir. Maliyel Beverido

viernes, 10 de julio de 2015

La magnificencia de Wislawa Szymborska


Wisława Szymborska, poeta, traductora y ensayista (1923-2012)


ENCUENTRO INESPERADO

Somos muy amables el uno con el otro.
Decimos que es bonito encontrarse después de tantos años.
Nuestros tigres beben leche.
Nuestros azores van a pie.
Nuestros tiburones se ahogan en el agua.
Nuestros lobos bostezan ante una jaula vacía.

Nuestras víboras se han sacudido los relámpagos,
los monos la inspiración, los pavos reales las plumas.
¡Cuánto hace que dejaron nuestro pelo los murciélagos!

Callamos sin terminar la frase,
Sonriendo sin remedio.
Nuestras personas
no saben cómo hablarse.

Traducción: Abel A. Murcia

***

EPITAFIO

Aquí yace como la coma anticuada,
la autora de algunos versos. Descanso eterno
tuvo a bien darle la tierra, a pesar de que la muerta
con los grupos literarios no se hablaba.
Aunque tampoco en su tumba encontró nada
mejor que una lechuza, jacintos y este treno.
Transeúnte, quita a tu electrónico cerebro la cubierta
y piensa un poco en el destino de Wislawa.

Traducción: Gerardo Beltrán

***

MOVIMIENTO

Tu aquí lloras, y allí bailan.
Y allí lloran en tu lágrima.
Allí fiesta, allí alegría.
Sin saber nada de nada.
Casi luz en los espejos.
Casi llamas de unas velas.
Casi patios y escaleras.
Casi puños, casi gestos.
El hidrógeno informal y el oxígeno a la par.
Los granujas cloro y sodio.
Ese golfo del nitrógeno en cortejo.
Que se alza, se evapora.
Gira y gira bajo el cielo.
Tú aquí lloras, a eso juegas.
Eine kleine Nachtmusik.
¿Tú quién eres bella máscara?

Traducción: Abel A. Murcia

***

ELOGIO DE LA MALA CONCIENCIA DE UNO MISMO

El ratonero no tiene nada que reprocharse.
Los escrúpulos le son ajenos a la pantera negra.
No dudan de lo apropiado de sus actos las pirañas.
El crótalo se acepta sin complejos a sí mismo.

No existe un chacal autocrítico.
El tábano, la langosta, la tenía y el caimán
viven como viven y así están satisfechos.

Cien kilos pesa el corazón de la orca,
Pero en otro sentido es ligero.

No hay nada más bestial
que una consciencia limpia
en el tercer planeta del Sol.


Traducción: Abel A. Murcia


No hay comentarios:

Publicar un comentario