Revolucionarias. Algunas de ellas tenían el grado de Coronelas o Generalas. |
En
el espacio bélico de la bien afamada novela de la revolución mexicana, un
cartucho femenino se carga de signos y revienta en 1931: es Cartucho de Nellie
Campobello. Una serie de relatos que atestiguan, recreándolos, episodios del movimiento armado
principalmente en Parral, que se convierte en el espacio representativo de la
lucha en el norte de México, sobre todo de los estados de Durango y Chihuahua.
Los
episodios que se narran surgen de la memoria almacenada en la mente de una
niña. De ahí, después de una tregua de distanciamiento histórico y geográfico,
la escritora realiza un trabajo estético y de creación literaria. Va soldando
una cadena narrativa, que se forma como una cartuchera de recuerdos, con la que
salda una deuda ética personal.
El
título se dispara desde todos lados.
Cada relato es un tiro que da al blanco que internamente es observado
por una niña y externamente le traspasa al lector a través del impacto que
provoca la autora al contarlo. Cartucho de pólvora y de tinta.
Nació el 07/11/1900 y su verdadero nombre fue María Francisca Moya Luna. |
Nellie
Campobello fue una escritora memorable por varias razones: su valor
testimonial, su refinadísima percepción artística y su extraña mirada
autobiográfica. La propia familia, con la madre al frente, fue testigo del Villismo en Parral. A través de
medio centenar de relatos breves, algunos entre los más singulares de la
lengua, Cartucho saca a la narrativa de la Revolución Mexicana de la demagogia
populista y de la retórica, dizque republicana, del heroísmo pretoriano. La
suya es una voz que elige uno de los artificios literarios más difíciles de
lograr: la impostación verosímil de la guerra civil desde un punto de vista
infantil. Quien narra en Cartucho es una niña y un verdadero
"monstruo" por su visión enternecida y minuciosa de la muerte. Los
capitanes de Villa, Doroteo Arango mismo, así como el fusilamiento y los
fusilados se convierten, gracias a Campobello, en el imaginario de la
Revolución Mexicana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario