Macanudo de Liniers

Macanudo de Liniers
"¿Y si no fuésemos otra cosa que los brazos de una voz?" Decir. Maliyel Beverido

domingo, 31 de julio de 2016

Un año sin #ju5ticiaNavarte


LA NARVARTE

El día de hoy se cumple un año del multihomicidio en la colonia Narvarte, un acontecimiento que refleja la situación que vive México en el ámbito de la libertad de expresión.
Son muchos y muchas periodistas que nos faltan en el país, todos y todas víctimas de la intolerancia y el autoritarismo de gobernantes locales, estatales y federales.

Quienes vivimos en México sabemos el tremendo valor que tienen los periodistas que se atreven a escribir y hablar con la verdad, a no querer tapar el sol con un dedo.

También sabemos de la bola de corruptos y asesinos que cada tres o seis años se hacen con el poder y desde ahí sangran a nuestro país todos los días.

Desde nuestro sitio vemos y sufrimos los atropellos; desde nuestro sitio unas veces hablamos y otras veces callamos; desde nuestro sitio hacemos o no hacemos, pero está claro que sabemos lo que pasa.

Nuestra solidaridad con las familias de l@s 5 de la ‪#‎Narvarte

Quienes sabemos del dolor, la dignidad, la rabia y la lucha les abrazamos.

*Texto: Omar García Velásquez. Sobreviviente del ataque perpetrado contra los estudiantes de la Normal Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, el día 26 de septiembre de 2014.

Imagen tomada de Sinembargo.mx

Carta

Cuando nos arrebatan lo que más amamos, no existe ya la posibilidad de justicia. Cuando la palabra justicia pierde significado, sólo nos queda la defensa de la memoria, la defensa propia.

“[…]  país-infierno, país de policías. Largo río de llanto, ancha mar dolorosa, república de ángeles, patria perdida. País mío, nuestro, de todos y de nadie […]” –Efraín Huerta.

Desde este país que se sostiene sobre pilares de miseria, injusticia, impunidad, corrupción y crimen.

Desde este país cuya gran parte de la sociedad se alza como una corte hostil para juzgarlo todo a través de su lente empañada de prejuicios y doble moral.

Desde este país donde “poderoso caballero es don dinero”.

Desde este país donde tienen el mismo argumento para todas las investigaciones de hechos violentos.

Desde este país donde se revictimiza a las víctimas y se protege a los criminales.

Desde este país donde los jueces dejan a la ciudadanía en un estado de indefensión con su omisión deliberada al dejar libres a los delincuentes, argumentando que no tuvieron el debido proceso o que “no sabían que iban a delinquir”.

Desde este país donde las Procuradurías exhiben el sistema de injusticia incapaz de armar casos sólidos y atender un número creciente de expedientes que se acumulan unos detrás de otros.

Desde este país cuyo interés político del Gobierno, no le permite mirar la escalada de violencia y se vuelve autoridad omisa o cómplice capaz de obstaculizar una investigación judicial.

Desde este país donde abrir los ojos cada día y descubrir que se está aquí, es más que un milagro.

Desde este país de fuegos cruzados, de defensorías de derechos para los delincuentes.

Desde este país donde nos crean la ilusión de libre tránsito y de libre expresión.

Desde este país donde impera la negligencia o la incapacidad en las instituciones.

Desde este país donde la mayoría de los medios son “peces de ciudad que perdieron las agallas en un banco de morralla”.

Desde este país donde te persiguen, te acosan, te amenazan.

Desde este país donde a la violencia de los criminales le sigue la violencia institucional.

Desde este país donde a uno lo van borrando, le van quitando la esperanza.

Desde este país donde parece ser que el único lugar seguro es un libro.

Desde este país donde no sirven nuestras palabras ante sus balas.

Desde este país mi voz pretende salir, alzarse y que la lleve el viento a resonar allende las fronteras para denunciar que al dolor que me invade por el asesinato de mi hija Nadia Dominique Vera Pérez, se aúna el dolor de saber que:

A una vuelta de la tierra alrededor del sol, es decir a un año de la masacre.

No se tiene un móvil claro.

No hay autoridad alguna que quiera hacer una investigación seria, justa, sin intereses políticos ni personales, sin dinero de por medio; una investigación clara, diligente, exhaustiva, eficaz y científica.

No se han castigado a los verdaderos culpables de las filtraciones del expediente.

No se ha investigado quienes se apropiaron de las pertenencias de las víctimas.

No se le ha permitido declarar a los amigos, familiares y vecinos que han querido aportar información.

No se ha buscado el arma con que se cometió el crimen.

No se mantuvo la cadena de custodia, no se protegió debidamente el lugar, los objetos y ninguna autoridad impidió que se modificara la escena del crimen.

No se acataron los protocolos para los interrogados del Gobierno del Estado de Veracruz, quienes recibieron trato preferencial, restándole así importancia a que fueron asesinadas cinco personas.

No ha sido contemplada la actividad de Nadia Vera como activista y de Rubén Espinosa como periodista, en la ciudad de Xalapa, como un hecho que los colocó en una situación de vulnerabilidad.

No se ha investigado al Gobierno de Veracruz (cuyos policías estatales vestidos de civil detuvieron, golpearon y robaron a Nadia Vera; la subieron a una camioneta y la amenazaron por sus actividades políticas; entraron a su casa y husmearon; y con todo ello la obligaron a emigrar al DF).

No se ha brindado a los familiares el apoyo de atención psicológica y jurídica.

No son capaces de entender que no hay dinero que repare el daño causado a nuestra familia, no hay dinero que pueda devolvernos a nuestra Nadia, a nuestro Rubén; no hay dinero que pueda curar la hondísima herida de nuestro corazón.

No han hecho su trabajo quienes así se ostentan como autoridades, no han hecho su trabajo ya sea por incapacidad o por negligencia, por intereses mezquinos o políticos.

Y aunque se hubiese hecho bien lo que no se supo hacer , ni con su encarcelamiento ni con sus vidas de los autores intelectuales y materiales del crimen, más allá de diez generaciones, podrían pagar ni restituir la generosa e invaluable presencia de nuestra Nadia, de nuestro Rubén, únicos e irrepetibles.

Mi país es un campo de amapolas / regado con la púrpura savia de los jóvenes. “Seamos realistas, hagamos lo imposible”.

Mirtha Luz Pérez Robledo, madre.

Julio, 2016.


jueves, 21 de julio de 2016

Norte: Mucho más que fronteras y desiertos








Norte. Una antología



Durante los últimos cien años los narradores nacidos o radicados en el norte se han multiplicado, alimentando con sus historias un imaginario colectivo que se desenvuelve en líneas fronterizas, desiertos, cadenas de montañas y urbes populosas donde habitan o deambulan lugareños y migrantes, gringos extraviados e indígenas supervivientes, seres de carne y hueso y espectros surgidos de realidades alternas. Desde los tres miembros del Ateneo de la Juventud incluidos aquí, Martín Luis Guzmán, Alfonso Reyes y Julio Torri, pasando por clásicos de la Revolución, como Rafael F. Muñoz y Nellie Campobello, hasta llegar a los jóvenes escritores en activo, hay en las presentes páginas un “aire de familia” que cualquier lector será capaz de reconocer.

Si la obra de aquellos fundadores devino piedra angular de la literatura mexicana contemporánea, autores como Rubín, Revueltas, Arredondo o Valadés elevaron la escritura del cuento hasta su punto culminante, y dieron paso a los miembros de las siguientes promociones hasta llegar a Gardea, Elizondo Elizondo y Sada, conocidos en los ochenta como “los narradores del desierto”. Y en la década del noventa –cuando se comenzaba a hablar de la literatura del norte o de la frontera–, aparecieron Élmer Mendoza, David Toscana, Luis Humberto Crosthwaite, Cristina Rivera Garza, Juan José Rodríguez, Julián Herbert, Luis Jorge Boone y César Silva, a quienes siguen los escritores surgidos en el cambio de milenio, que abren nuevas rutas temáticas y técnicas, y acuden a géneros y subgéneros antes desdeñados, con lo que mantienen en el centro del debate literario la producción regional.

Norte. Una antología es una muestra de cuarenta y nueve narradores del norte. Su propósito es acercar y hacer perceptibles a todos los lectores esos rasgos que distinguen al ser norteño, tanto en lo que respecta a los hombres y mujeres que habitan esa realidad como a los personajes surgidos de la imaginación de sus creadores.

Pasional



María del Carmen Mondragón Valseca: Mirada hipnotizante que seducía a cualquiera, carácter fuerte y extravagante. La mujer que dicen que fue la más bella de su época nació el 8 de julio de 1893 en México pero estudió en Francia, cuando Porfirio Díaz envió a su padre a Europa en una misión. A los 10 años, Carmen escribía rebelde: “Protesto a pesar de mi edad por estar bajo la tutela de mis padres”, cuando pensaba en que le arreglarían un matrimonio.

Carmen, hija del General Mondragón – quién resulto ser uno de los participantes de la Decena Trágica, motivo por lo que fue desterrado del país – fue conocida desde siempre como una niña burguesa con un espíritu indomable, con una gran ansiedad por amar y ser amada y hasta idolatrada.

En 1921, después de una larga estadía en Europa, regresa a México, donde es pionera en el uso de la minifalda  y se mezcla con los círculos culturales más importantes de la época, donde ella no sólo es musa sino también creadora: la poesía y la pintura son sus dos principales formas de expresión; aunque actualmente aún no se ha publicado toda su obra.

A los 20 años se enamora de un cadete del regimiento de su padre, el después pintor Manuel Rodríguez Lozano quién la desilusionaría  tanto en lo emocional como en lo íntimo: pues Rodríguez Lozano era homosexual. Se casaron en 1913. El matrimonio fue tormentoso, marcado por peleas y la muerte de su único hijo cuando todavía era un bebé; la leyenda dice que la propia Carmen lo ahogó, pero la investigación histórica sostiene que el niño falleció mientras dormía. En 1921 el matrimonio volvió a México; Carmen quiso el divorcio, pero su familia no se lo permitió, no eran épocas de divorcios, pero a Carmen poco le importó.

Conoció a Gerardo Murillo, famoso artista y vulcanólogo que intervenía en política y se mudaron al ex convento de La Merced. Murillo se cambió su nombre por Dr. Atl (agua en náhuatl) cuando viajaba en barco de Nueva York a París y se desató una tremenda tempestad.

Dr. Atl se convirtió en una influencia tan grande en la joven que ella decidió cambiarse el nombre por Nahui Olin, que es la fecha que en el calendario azteca significa el movimiento renovador de los ciclos del cosmos, y comenzar una carrera como pintora y poeta; y entonces renunció, para siempre, a ser María del Carmen Mondragón Valseca.

“Mi nombre es como el de todas las cosas: sin principio ni fin, y sin embargo sin aislarme de la totalidad por mi evolución distinta en ese conjunto infinito, las palabras más cercanas a nombrarme son NAHUI-OLIN. Nombre cosmogónico, la fuerza, el poder de movimiento que irradian luz, vida y fuerza. En azteca, el poder que tiene el sol de mover el conjunto que abarca su sistema, pero, sin embargo hace siglos que existe mi substancia sin nombre alguno va evolucionando y hace siglos y ahora mismo que no tengo nombre y voy marchando sin descanso alguno en un tiempo sin fin y soy en una faz distinta el sin principio ni fin de todas las cosas.”

Nahui Olin y el doctor Atl fueron una pareja perfecta y explosiva que causaba terremotos emocionales en el convento de la Merced, su hogar. Vivían cada momento como si fuera el último, como si quisieran consumirse de pasión y resucitar al siguiente día para comenzar otra vez. El Doctor Atl y Nahui Olin eran excéntricos y que vivieron sus días juntos tan apasionadamente que las discusiones, los celos y el romance los consumieron.


“Amor eterno, amor Atl, la palpitación de mi corazón es el sonido de tu nombre, que amo con toda la frescura de mi juventud, único ser que adoro, moja los ojos de tu amada con el semen de tu vida, para que se sequen de pasión, quien no ha…y será, más que tuya”.

El Doctor Atl celaba a la pintora porque constantemente posaba desnuda para otros pintores y fotógrafos, probablemente para celebrar su libertad y derecho a decidir su vida: no seguir las reglas impuestas por el general, encontrar su camino, seguirlo y vivirlo como le pareciera mejor. Su cuerpo fue el medio para expresar tanto su libertad como su sexualidad; era la extensión que le permitía alcanzar a alguien más y unirlo a su existencia. Por ello, posó desnuda para el fotógrafo Edward Weston en Hollywood.

Poco después, de finalizar su relación con Alt, Nahui pudo encontrar la calma al lado de Eugenio Agacino, marino español con quien vivió un romance menos pasional y más romántico. La pareja perfecta se rumoraba en la época; sin embargo, Agacino murió intoxicado en Cuba.

Ella lo esperaba en la orilla del mar de Veracruz. Él nunca llegó. Desde ese momento, la artista decidió alejarse de la vida pública. Deshecha por su mala suerte en el amor, por perder a su único aliado de esos días y dio su carrera artística como finalizada. Después de la muerte de Eugenio Agacino, Nahui Olin no volvió a ser la misma. Dedicó menos tiempo a la pintura y más a escribir. Sin embargo, expuso por última vez en 1945. A pesar de la desdicha, Nahui Olin vivió 40 años más.


En los últimos años de su vida, vivió con sus gatos en la casa que heredara de sus padres, desempeñándose como maestra de pintura en una escuela primaria y sostenida apenas por una beca que le daba Bellas Artes. Andaba por la calle vestida con harapos, y decía que “era la dueña del sol: cada mañana, lo hacía salir con su mirada, y cada noche lo devolvía al ocaso”. Se convirtió en un personaje triste para todos, menos para ella, que seguía orgullosa de su cuerpo y su pasado. Nunca pudo olvidar a Eugenio: hasta su muerte, colgó en su casa una sábana donde había pintado a su amante capitán y dormía abrazada a ella. El único adorno verdadero que la acompañó en esos días de locura fueron el par de ojos verdes que nunca perdieron el brillo ni el color. Aquellos que tuvieron el valor de mirar el funeral del Dr. Atl en Bellas Artes y no se mostraron deshechos como lo estaba su dueña.

Muy enferma pide a sus sobrinas que la trasladen a la recámara donde nació y el 23 de enero de 1978, Carmen Mondragón / Nahui Olin, cierra por siempre sus bellos y enormes ojos verdes. Los restos mortales de Carmen Mondragón descansan en el Panteón Español en la Ciudad de México.

“Mi cuerpo y mi espíritu tienen siempre loca sed de esos mundos nuevos que voy buscando sin cesar y de las cosas o los individuos que tienen siempre nuevos rostros bajo la influencia de mi espíritu, es una inquietud creadora que juega con esos mundos que voy creando.”



***

Insaciable sed
(Fragmento)

Nahui Olin

Mi espíritu y mi cuerpo tienen siempre loca sed
de esos mundos nuevos
que voy creando sin cesar,
y de las cosas
y de los elementos,
y de los seres,
que tienen siempre nuevas fases
bajo la influencia
de mi espíritu y mi cuerpo que tienen siempre loca
sed;
inagotable sed, de inquietud creadora,
que juega con los mundos nuevos
que voy creando sin cesar
y con las cosas que son una, y que son mil.
Y con los elementos,
y con los seres
que me dan insaciable sed—
y que no sé
si tienen
algo de sangre,—
algo de carne
o algo de espíritu—
que sirven de juegos intermitentes a la sensibilidad
de mi materia.

                                  ***

***Nahui Olin (1893-1978) fue una artista, por épocas pintora, por épocas escritora o compositora. Pero México la olvidó hasta que en 1992 se comenzó a hacer una catalogación de sus pinturas para una retrospectiva que se concretó en 1993 en el Estudio- Museo Diego Rivera, de la Ciudad de México.


***Fragmento tomado de: Nahui Olin: sin principio ni fin. Vida, obra.Universidad Autónoma de Nuevo León, 2011.

sábado, 9 de julio de 2016

The Beatles: When I'm Sixty-Four




Con todo mi corazón para Ahn Knoc Tang Ramírez in memoriam y para Theo Martínez porque los que estuvieron juntos en amor, seguirán juntos en él sin importar lo que pase.






Corazón que atraviesas por altas horas
corazón que no dejas de navegar
piensa que ya muy lejos
tal vez a solas
otra sangre tampoco puede olvidar.

Ramón Rodríguez



jueves, 7 de julio de 2016

La mujer que ahorró 15 años para poder ir a la universidad


Nettie Stevens, la primera investigadora en responder por qué se nace hombre o mujer


Nettie María Stevens (1861-1914) revolucionó los campos de la embriología y la citogenética. Su principal contribución, junto a la de su coetáneo Edmund Beecher Wilson, fue descubrir la influencia cromosomática en la asignación del sexo en el feto. Stevens tiene a su favor identificar los cromosomas X e Y como responsables y sentar las bases de la citogenética moderna.

Reconocida internacionalmente al final de su vida, Nettie Stevens tuvo que luchar desde un primer momento con la etiqueta “negativa” de ser mujer. Se graduó la primera de su clase en su escuela primaria, en Westford, Vermont. Sin embargo, debido a las barreras económicas, acrecentadas por su condición de mujer, Stevens tuvo que ahorrar durante más de quince años trabajando de maestra de escuela y bibliotecaria. Eligió precisamente compaginar su labor docente con el trabajo en la biblioteca para poder mantenerse al día de todas las novedades científicas.

Cuando consiguió el dinero suficiente, a la edad de 35 años, Nettie Stevens ingresó en Universidad de Stanford. Completó su licenciatura como genetista en tres años, empleando otro más para terminar su tesis doctoral. Completó su formación con estudios complementarios en fisiología e histología. Nettie comenzó su carrera como investigadora en el equipo del eminente biólogo Thomas Hunt Morgan.

Los excelentes resultados dentro del equipo de Morgan y el creciente interés que despertaban los trabajos que publicaba le permitieron acceder a numerosas becas para viajar por Europa. Se centró especialmente en Zoología tras su paso por la prestigiosa Estación de Zoología, en Nápoles.

Su interés por la biología, la zoología y sus extensos conocimientos en histología la llevaron a descubrir la presencia del cromosoma Y en varias especies de insectos. Nettie Stevens teorizó, correctamente, que la presencia o ausencia de este cromosoma era la única diferencia apreciable entre sexos de las mismas especies. Lo que la llevó a correlacionar dicho cromosoma, al que posteriormente se unió el X, como marcadores genéticos del sexo. Identificó los cromosomas X e Y como responsables de determinar el sexo del feto. Sus descubrimientos la catapultaron a la fama internacional.


Después de su muerte, siguió recibiendo reconocimientos internacionales y sus compañeros destacaron la enorme independencia con la que era capaz de trabajar. Fruto de las dificultades que tuvo que ir superando a lo largo de su exitosa vida como investigadora. 

Debajo de la sonrisa, sangre y llanto





Mi patria es dulce por fuera

Nicolás Guillén

Mi patria es dulce por fuera,
y muy amarga por dentro;
mi patria es dulce por fuera,
con su verde primavera,
con su verde primavera,
y un sol de hiel en el centro.

¡Qué cielo de azul callado
mira impasible tu duelo!
¡Qué cielo de azul callado,
ay, Cuba, el que Dios te ha dado,
ay, Cuba, el que Dios te ha dado,
con ser tan azul tu cielo!

Un pájaro de madera
me trajo en su pico el canto;
un pájaro de madera.
¡Ay, Cuba, si te dijera,
yo que te conozco tanto,
ay, Cuba, si te dijera,
que es de sangre tu palmera,
que es de sangre tu palmera,
y que tu mar es de llanto!

Bajo tu risa ligera,
yo, que te conozco tanto,
miro la sangre y el llanto,
bajo tu risa ligera.

Sangre y llanto
bajo tu risa ligera;
sangre y llanto
bajo tu risa ligera.
Sangre y llanto.

El hombre de tierra adentro
está en un hoyo metido,
muerto sin haber nacido,
el hombre de tierra adentro.
Y el hombre de la ciudad,
ay, Cuba, es un pordiosero:
Anda hambriento y sin dinero,
pidiendo por caridad,
aunque se ponga sombrero
y baile en la sociedad.
(Lo digo en mi son entero,
porque es la pura verdad.)

Hoy yanqui, ayer española,
sí, señor,
la tierra que nos tocó
siempre el pobre la encontró
si hoy yanqui, ayer española,
¡cómo no!
¡Qué sola la tierra sola,
la tierra que nos tocó!

La mano que no se afloja
hay que estrecharla en seguida;
la mano que no se afloja,
china, negra, blanca o roja,
china, negra, blanca o roja,
con nuestra mano tendida.

Un marino americano,
bien,
en el restaurant del puerto,
bien,
un marino americano
me quiso dar con la mano,
me quiso dar con la mano,
pero allí se quedó muerto,
bien,
pero allí se quedó muerto
el marino americano
que en el restaurant del puerto
me quiso dar con la mano,

¡bien!





Recita Rafael de Penagos (Madrid, 1924)



martes, 5 de julio de 2016

Las horas detenidas

Biblioteca de Sarajevo, 1992.

Las vacaciones de mis padres

Izet Sarajlić

Desde hace quince años, cada 5 de septiembre, mis padres hacen las maletas y se van, cargados de un montón de cosas inútiles, a pasar quince días en Herceg Novi. Mi padre no soporta el mar, mi madre tampoco es entusiasta, pero pueden verla de lejos, sentada en una silla junto a la orilla, cuando cae la tarde, contemplando la isla de Manula donde su hijo mayor, Ešo, fue fusilado el 16 de julio de 1942. Yo estoy seguro que mi madre lleva en un tarro un poco de mermelada de cerezas. Ešo la robaba siempre en la cocina. Así mis padres, en el crepúsculo, de Herceg Novi, fijan con la mirada el punto que fue su último refugio terrestre. Turismo horrible aquel de la tristeza. No se lo deseo a nadie.

 ***

La suerte a la manera de Sarajevo


Izet Sarajlić

En Sarajevo,
en esta primavera de 1992,
cualquier cosa es posible.

Estás en la cola para comprar el pan
y despiertas en un hospital
con una pierna amputada.

Después, incluso reconoces que has tenido mucha suerte.

 ***

La quema de los libros


Izet Sarajlić

Para protestar contra la indiferencia de la opinión pública internacional
algunos miembros de la Unión de Escritores
han anunciado que hoy
quemarán en público sus propios libros.

En su comunicado
veo que figura también mi nombre.

Es cierto,
apruebo de corazón esta protesta
contra la indiferencia del resto del mundo,
pero yo nunca quemaré mis libros.

En primer lugar, porque los amo
y después porque será mejor
enviárselos a Ismar,
que hoy trabaja como farmacéutico en Suiza,
para que recuerde
la época en la que reparaba mi techo
tapando los agujeros causados por las granadas.

 ***

Perro vagabundo


Izet Sarajlić

A Lutvo Hodžić

(Dado que el enorme número de perros vagabundos sobre el territorio de la ciudad, de la circunscripción de Koševo 2 nos ha sido notificada la obligación de denunciar el avistamiento de cada perro vagabundo a la Cancillería)
¿Debo denunciarme a mí mismo?

¿No soy quizá un perro
y sobre todo vagabundo?

No sé ni siquiera
en qué maleta
ni en la cantina de quién

están mis documentos.



*Izet Sarajlić (1930-2002) fue filósofo, ensayista, traductor y poeta. Sarajlić es el poeta de Bosnia y Herzegovina más conocido después de la Segunda Guerra Mundial y el más traducido de la ex Yugoslavia.